Artículo Cosmopolitan

Anja Rubik es una de esas modelos especiales, diferentes al resto. Siempre quiso dedicarse a la moda y, con mucho esfuerzo, consiguió cumplir su sueño.

Su espectacular figura y su especial mirada, entre serena y melancólica, han convertido a la modelo polaca en una de las tops más importantes de los últimos años. Anja Rubik, que desde pequeña quiso dedicarse a la moda cumplió su sueño de meterse en el mundillo con tan solo 15 años, cuando ganó un concurso organizado por una agencia local. En esa época, consiguió protagonizar algunas portadas y editoriales de revistas de su país, como la edición polaca de Cosmopolitan. Pero fue a partir del año 2000, con 17 años, cuando su carrera comenzó poco a poco a despegar, en el momento en que algunas agencias parisinas se fijaron en ella. Unos meses más tarde, Anja se trasladó a París, aunque sólo trabajaría en vacaciones ya que primero tenía que terminar sus estudios. A pesar de ello, la modelo consiguió desfilar en 2001 para grandes como Kenzo o Rochas, logrando dedicarse a lo que más le gustaba de una forma un más profesional.

En 2002, tras terminar sus estudios, la maniquí dio el gran paso y se trasladó a Nueva York para centrarse únicamente en su carrera como modelo, su gran pasión. Sin embargo, su carrera avanzó poco a poco hasta que en 2005 se produce el despegue definitivo: termina el año con más de 50 desfiles por temporada y convirtiéndose en imagen de firmas tan destacadas como Chloé, Ungaro o Armani.

Con su radical corte de pelo en 2006, que la diferencia claramente del resto de maniquíes, comienza lo que muchos han denominado como el Anja´s Boom. Pasa a ser imagen de campaña deChanel, H&M,Valentino,Oscar de la Renta,... una lista interminable que consagra a la modelo como una de las más cotizadas de la actualidad.